Tal vez por ese miedo, el descuido o la falta de información tenemos muchas creencias erradas acerca de las manchas, a quiénes afectan y cómo prevenirlas. Así que para proteger nuestra salud y belleza, tengamos algunos consejos básicos para evitar que aparezcan.
- Como las manchas son producto de la insuficiente producción de melanina, no solo basta con aplicar cremas, incluso si tienen componentes especiales. También es necesario que se absorban desde el interior los compuestos minerales a través de la ingesta de alimentos ricos en betacaroteno, como la zanahoria, papaya, etc. y mucha agua.
- Informémonos muy bien de los medicamentos que tomamos y sus efectos secundarios, ya que alguno podría ocasionar la aparición de una gran cantidad de manchas y consecuencias similares.
- Ya que la contaminación se está incrementando cada vez más, resulta imprescindibe aplicarse protector solar en las zonas de mayor exposición (especialmente el cutis y los labios). La medida estándar es el FPS 50, pues entre este y el de 100 la diferencia es mínima.
- Antes de someternos a cualquier tratamiento anti-manchas consultemos a un dermatólogo de confianza sobre su conveniencia. Por ejemplo, si bien los tratamientos láser pueden borrarlas, también pueden ocasionar la formación de manchas blancas y de mayor tamaño que las que teníamos.
- Sin importar nuestra tonalidad de piel, todos tenemos las mismas posibilidades de adquirir manchas, cuya presencia puede llegar a convertirse en una enfermedad crónica. Así que la mejor medicina preventiva es una buena alimentación y evitar los excesos. No nos expongamos al sol entre las 12 del mediodía y las 3 de la tarde y menos sin una buena capa de protector.
Fuente: Viviendosanos.com