Las dietas rápidas, una solución a muy corto plazo
En estos tiempos que corren, la velocidad, los resultados rápidos, lo instantáneo y ese tipo de cuestiones relacionadas con la brevedad y lo fugaz, son en buena parte las que determinan ciertos aspectos de la vida. Obviamente, la pérdida de peso no suele estar exenta de este tipo de cuestiones. Por eso mismo, hoy por hoy te encontrarás con un sin número de opciones que te prometen el oro y el moro en una semana. Pero, ¿sirven realmente esta clase de régimenes?
Las dietas rápidas, por un lado, deben ser unas de las más requeridas en estos últimos tiempos. Todos quieren perder peso ya, cuanto antes, sin importar mucho el cómo. Así es como terminan subiéndose a regímenes que no son para nada buenos. Por eso mismo, este artículo sobre esta clase de planes alimenticios seguramente te va a ayudar a tomar conciencia si son lo que necesitas o no.
¿Qué son las dietas rápidas?
Generalmente son dietas que duran no más de una semana. Sus características cambian entre sí. Tienes algunas que son proponen un ayuno o cura, otras que se basan en zumos o batidos y, casi siempre, tienen a un ingrediente depurativo como el guía del régimen. Habitualmente, son muy reducidas en calorías, en proteínas, en hidratos de carbono y también en grasas. Tienen mucha fibra, muchos elementos que actúan diuréticamente y también elementos que tienen la capacidad de saciar con poco aporte energético.
Tienes ejemplos como la dieta del plátano, la dieta de la gelatina o la dieta del té verde, por poner tres ejemplos puntuales y diversos.
¿A qué apuntan las dietas rápidas?
A perder unos pocos kilos en un lapso de tiempo también corto. Como se señaló, son dietas relámpago, pensadas en depurar y quitar líquidos como una solución rápida, que puedas poner en práctica en pocos días y que te dará un determinado resultado, de acuerdo a cómo responda tu cuerpo y a qué dieta rápida has decidido seguir.
¿Tiene efecto rebote?
Lo más probable es que esos kilos que perdiste por efecto de elementos depurativos o diuréticos, se recuperen bastante rápido. Es que no puedes hacer una dieta rápida para siempre y comer de esa forma, porque seguramente tu cuerpo comenzaría a deteriorarse y quedarse sin nutrientes a no mucho andar.
Entonces, ¿dan o no dan resultados?
Eso es lo que terminarás juzgando tu mismo, de acuerdo a cuales son tus intereses. Si lo que tu pretendes es deshincharte un poco, perder algo de grasa y, por sobre todas las cosas, mover el vientre y eliminar líquidos retenidos, probablemente entonces una dieta rápida de una semana o menos te puede llegar a servir.
Si quieres perder peso de manera consistente, sin efecto rebote y ganando hábitos saludables como la alimentación sana y la actividad física, cosas que quedan para toda la vida, pues entonces esta no es la clase de opción que necesitas. Una dieta rápida será un parche, una solución momentánea, pero no una enseñanza para toda la vida, ni algo que puedas poner en práctica a diario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario